¿Intriga o fuerza bruta? Te traemos nuestro análisis de Armello.

“El reino de Armello está repleto de magia y maravillas, sin embargo, una oscura sombre se cierne sobre sus tierras. Nuestro otrora poderoso rey ha sido tocado por la maldad…”.

Con esta poderosa frase nos adentramos en el más reciente videojuego del colectivo australiano League of Geeks. Título que, de buenas a primeras, se posiciona excelsamente entre las más sólidas propuestas de su género, el rol de mesa. Sin embargo, sería una imprudencia asegurar, como otros tantos han hecho, que se trata de una aventura comparable a referentes descomunales como Juego de Tronos o el Señor de los Anillos, aún cuando sea evidente la profesionalidad y el cariño puestos en su creación.

Superada esa primera discusión, vale la pena destacar que Armello brilla con luz propia. Su universo acrisolado se nutre de las sagas escandinavas, la mitología anglosajona y la vigorosa influencia, claro está, del Dungeons and Dragons. Pero ¿cuántos títulos no pueden decir lo mismo? La diferencia de una propuesta como esta no radica en la capacidad intelectual de sus creadores al momento de proyectar un escenario profundo, con una historia bien desarrollada e interesante (que la tiene), ni tampoco en su diseño infrecuente. No. La gran virtud de este título radica en el potencial humano de los jugadores, pues está pensado de esa manera. Como todo buen juego de rol de mesa depende, en última instancia, de la habilidad, y hasta cierto punto, de la suerte.

Adentrémonos en la premisa:

Historia

El poderoso rey (que a nadie sorprende sea un león) está enfermo. Ha sido infectado por “La Podredumbre” —The Rot en su original inglés—, la enfermedad más temida por los habitantes y súbditos del reino. Tal dolencia parece haberle sumido en un estado de locura sin igual, que se acreciente cada día, augurando un negro futuro para todos. Por supuesto, el bienamado rey, en lugar de producir compasión engendra avaricia, hasta el punto en el cual más de un hombre, mujer —o bestia— encontrará en su enfermedad la oportunidad perfecta para hacerse con el poder. Los líderes de Armello, entre los cuales encontraremos lobos impetuosos, osos jorobados y liebres efusivas, procurarán agendarse una cuota de la gloria antes de que el rey perezca.

El relato principal es interesante, pero no es lo único que el juego nos ofrece. Hemos llegado a considerar que lo más interesante en este aspecto es lo que le rodea. Es decir, la maraña de intrigas, enredos y pormenores ostentados de manera muy decente en las quests secundarias y en los diálogos de los personajes. Algo que los jugadores expertos de rol agradecerán profundamente, porque de eso se trata más que nada, del construir un ambiente entretenido y verosímil. Armello provee, sin perder ni un miligramo de genio al momento de la acción.

 

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Sencillo y preciso. Así es el sistema de consejos de Armello.

Hint System

La premisa del juego es sencilla, con reglas claras y de rápido aprendizaje. Lo que puede traducirse como una iniciativa bien estructurada. Sin embargo, eso no quiere decir que profesionalizarse o perfeccionar la habilidad que los elementos más arduos del juego requieren sea pan comido.

Vemos de forma positiva la orquestación del prólogo, que además de procurarse una primera entrada en la historia del título brinda a los más novatos un régimen de consejos y tips sumamente preciso. Dice, pues, lo que hay que decir. Ni menos, ni más. Las recomendaciones son concisas y se fundamentan, ante todo, en los aspectos mecánicos del juego. Como por ejemplo, la locación y utilidad de los recursos, la disponibilidad y el coste de las habilidades, la ganancia o pérdida de objetos preciados a través de objetivos específicos, etcétera.

Como suele suceder en la mayoría de los juegos de mesa basados en un sistema de dados y cartas, nuestro personaje contará con una proporción equilibrada de puntos de acción, vida, lucha y prestigio. De entre estos cuatro elementos, el que más debe preocuparnos es el último, pues representa la linea divisoria entre la victoria final o la derrota absoluta.

Los puntos de acción o AP representan el movimiento. Por cada turno contaremos con tres, simbolizando cada uno la posibilidad de desplazarnos al hexágono siguiente. Hay que tomar en cuenta que no todos los hexágonos tienen el mismo costo, por lo que la aptitud para calcular lo necesario hasta el próximo asentamiento o bosque (lugar que otorga una bonificación especial en sigilo) es un rasgo a tomar en cuenta.

La vida, denominada body health en el juego, variará a partir de una serie de opciones. En primer lugar, el tablero mismo. El movimiento entre un hexágono u otro (remembranzas de la saga Civilization) estará condicionado por aspectos como el relieve o la distancia. Por ejemplo, subir una cumbre escarpada nos costará dos puntos de acción en lugar de uno, pero no reducirá nuestra vitalidad. En cambio, recorrer un terreno sinuoso, de superficie quebrada, nos costará un punto de vida.

La lucha mide principalmente nuestra habilidad en combate, pues en el momento azaroso de tirar los dados tendrá una importancia fundamental.

El prestigio nos posicionará en un lugar de provecho ante nuestros adversarios si sabemos nivelarlo adecuadamente. Dependerá, claro está, de la estrategia escogida, pero aún así recomendamos prestarle atención, pues si al morir el rey ninguno de los jugadores ha logrado conquistar el trono, la cantidad de prestigio adquirida decidirá el destino del juego. Para aumentar el prestigio hay varios métodos. El primero de ellos es, por supuesto, realizar quests. Algunas, por su dificultad, serán más beneficiosas que otras. También es posible progresar en este aspecto derrotando al enemigo, sea o no un NPC.

Mecánica

Cuentan los rumores que el equipo desarrollador del título dedicó ocho meses al examen de las mecánicas más sobresalientes del rol de mesa antes de empezar a programar. La decisión, por supuesto, rindió sus frutos.

Esto es notable tras algunas horas de atención minuciosa alrededor de uno de los aspectos protagónicos de Armello: las cartas. A través de ellas podremos otorgar bonificaciones especiales a nuestros personajes, dentro y fuera del combate. Representan el aspecto más complejo del juego y dominarlas implica el reto máximo. A lo largo de la aventura encontraremos follower cards (sólo aplicables a nuestro héroe), item cards (capaces de aumentar o transformar cualquiera de los cuatro stats principales), spell cards (cuyo costo dependerá de la estadística “magia”) y trickery cards (parecidas en efecto a las cartas de hechizos, pero cuyo costo se mide en prestigio o poder).

Para conseguirlas deberemos prestar atención a nuestra fortuna, que podremos acrecentar cumpliendo objetivos o conquistando emplazamientos. Cada amanecer (el tiempo transcurre al pasar el turno) significará la reposición del capital a gastar.

Alredor de las miles de combinaciones posibles, que dependerán única y exclusivamente del usuario, se organiza la mecánica final del título. De qué manera, en qué medida, tras cual momento será necesario o preciso establecer tal o cual combinación, movida o sutileza, es la gran incógnita del juego. Allí radica su preciosa diversidad, y el arduo trabajo de investigación y experimentación de los profesionales que componen League of Geeks. 

 

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A la hora de combatir recomendamos prestar atención a las posibles bonificaciones que un buen mazo ofrece.

Combate

El jugador tendrá la oportunidad de demostrar qué tan versado está en las idas y venidas del rol al momento de enfrentarse a otros usuarios. Como suele suceder con los juegos basados en sistemas de dados, el azar juega un papel importante. Lo que no quiere decir que la victoria sea algo azaroso. Dependerá en gran medida de toda una serie de elementos ya mencionados, que incluyen la estructuración del mazo y la utilización de las bonificaciones al momento de reñir.

Cada batalla, desde el punto de vista maquinal, enfrentará nuestros puntos de lucha con los del enemigo. Principalmente, con la cantidad de puntos de lucha de su ataque. Los beneficios en armadura, armamento, magia, sigilio y demás, obtenidos a partir de un mazo bien organizado, otorgarán un valor agregado.

En líneas generales, se trata de una aventura basada en decisiones. Y para tomar decisiones hace falta conocimiento e intuición. Lo que, reiteramos, no tiene nada de fortuito.

Entorno gráfico

Uno de los aspectos más loables del juego y que, sin lugar a dudas, merece el siguiente juicio de valor: original.

En los últimos años, la industria de los videojuegos independientes se ha enfocado en el desarrollo de propuestas llamativas, preciosas a la vista, en ocasiones de profunda vocación artística. Títulos como Banner Saga o  Braid son un ejemplo de ello, Armello no se queda atrás.

Evidentemente, ante un mundo habitado principalmente por animales con propiedades antropomórficas, vale la pena preguntarse hasta qué punto es posible evidenciar características propiamente humanas, cualidades en lugar de rasgos, y si es posible superar las limitaciones que algún que otro referente aniñado como el Robin Hood de Disney pueda poseer. Creemos que Armello supera todos estos obstáculos. La animación es fluida y el diseño de personajes preciso. El escenario, tanto en su versión tridimensional ingame como en los lapsos cinemáticos, es francamente destacable. El bosquejo de las cartas es asunto aparte: trabajo de virtuosos.

Banda Sonora

El otro gran logro del videojuego. Compuesta por Lisa Gerrard y Michael Allen, cuenta con la dosis perfecta de epopeya, misterio y fantasía. Capaz de cumplir su cometido, pues constituye el pilar de mármol de Armello en su intención de constituirse como una alternativa envolvente, capaz de producir verdadera inmersión.

Siguiendo el ejemplo de clásicos como The Elder Scrolls Dragon Age, ha llegado a confirmar una premisa fundamental: que en un universo de fantasía que desea procurarse un aura de lejanía y senectud, es necesario contar con melodías tan grandes e imponentes como sus héroes.

Sin lugar a dudas, gloriosa.

RESUMEN

Armello es un juego especial. No toda transfiguración de la mesa a las plataformas digitales llega a este nivel o promete, siquiera, conquistar alguno de los elementos propios de su versión original. Si bien el título no responde a un referente externo, sabe constituir una atmósfera adecuada que hará sentir a más de un experto rolero como en casa.

Agradecemos una iniciativa como esta, porque requiere tiempo, preparación y esfuerzo. En una industria repleta de juegos ridículamente sencillos, mecanizados, lineales, siempre resulta fresco imbuirse en las aguas de la estrategia, pero de la estrategia bien concebida.

Loores a aquellos que lo merecen, ¡y que viva el Rey!

 

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