En un mundo caído a pedazos, un hombre buscará respuestas de su pasado
Presentado el 14 de Junio de 2016 durante la conferencia de prensa de Sony en el marco de la E3, Days Gone es la nueva propuesta de Bend Studios para PlayStation 4. Es el primer juego que lanzan para consolas domesticas desde 2010 con la adaptación a PS2 de Syphon Filter: Logan’s Shadow.
En este caso la historia nos pondrá en los zapatos de Deacon, un ex motoquero del Mongrel Motorcycle Club que buscará una respuesta para los eventos que sucedieron hace dos años en Oregon, y que involucran a su esposa y lo que sucedió para que se originara este apocalipsis. Pero Deacon no estará solo, ya que contará con la ayuda de Boozer, uno de sus antiguos compañeros dentro del MMC.
Days Gone se juega como cualquier otro juego de disparos en tercera persona, pero poniendo especial énfasis en la supervivencia, es decir que tendremos que cuidar mucho nuestra munición y recursos si queremos permanecer con vida. El mundo es hostil, y no solamente tendremos que preocuparnos por la horda de freakers (zombies dentro de Days Gone) que amenaza por matarnos, sino distintas pandillas y grupos de humanos que son hostiles contra todo superviviente que no se encuentre en su bando, buscando robarles lo poco que tengan encima. Cabe destacar que el gameplay me resulto bastante pulido, disparar y apuntar el gran arsenal que tenemos a nuestra disposición se siente cómodo, ya sea luchando contra humanos o contra freakers. Algunos errores de inteligencia artificial pueden sacarnos la inmersión, especialmente en campamentos humanos. Para los infectados, su comportamiento está muy cuidado y se manejan muy bien entre las hordas, investigando si creen que estamos cerca o saltando hacia nosotros para tirarnos de nuestra motocicleta.
Deacon tendrá la posibilidad de fabricar sus propias armas de combate cuerpo a cuerpo en el campo de batalla, así como también distintos tipos de explosivos y vendajes para curarnos y continuar con nuestra búsqueda al mejor estilo The Last of Us. Por supuesto, como la mayoría de los juegos de tipo Open World de hoy en día, Days Gone nos ofrece un extenso sistema de mejoras que nos permitirán aumentar las habilidades de combate para derrotar enemigos más fácilmente, como así a la vez obtener mayores recursos de nuestro entorno, entre otros.
El gran distintivo de Days Gone es sin lugar a dudas la motocicleta, la cual será vital para recorrer el mapa del juego. Si bien es cierto que la moto en lineas generales responde bien, siento que me hubiese gustado que puliesen un poco más el sistema de manejo, ya que en áreas que son un poco más cerradas o con obstáculos sí se complica manejar la moto y hará que choquemos con alguna pared o valla. Algo que captó mi atención, es la integración de la moto para alcanzar ciertos lugares o recolectar ciertos coleccionables, ya que es una forma ingeniosa de incorporar un elemento de exploración como el único medio a través del cual podremos conseguir encontrar este item en particular. Quizás, esto es algo similar a lo que ocurría con Epona en The Legend of Zelda: Ocarina of Time donde necesitábamos de nuestro caballo para acceder a un área determinada que estaba bloqueada si queríamos ir caminando. Lo mejor de la motocicleta es que se puede mejorar con distintos upgrades que se compran a los distintos mecánicos dispersos a lo largo de Oregon.
Un punto que quizás resulte un poco flojo para los jugadores y fanáticos de los títulos open world de hoy en día, es que el territorio que tendremos para explorar y avanzar a lo largo de la campaña la verdad resulta un poco pequeño cuando lo comparamos con otros juegos del mismo estilo como pueden ser Horizon: Zero Dawn o Red Dead Redemption 2. Sencillamente en cuanto a metros cuadrados, Days Gone no está a la altura. No obstante, creo que no todo esta perdido, ya que si algo me llamo mucho la atención de este juego es el nivel de detalle que tiene cada lugar y cada escenario en particular: Las casas están llenas de objetos como si hubiesen intentado saquearlas, los baños públicos se encuentran sucios y en mal estado, por ejemplo. Lo que quiero decir con esto es que el mundo no se siente genérico, sino que la gente de Bend Studios ha hecho un excelente trabajo a la hora de vendernos su creación post-apocalíptica, y creo que esto es algo que debe ser destacado.
En cuanto a los gráficos y la performance he de decir que visualmente el juego se ve muy bien y es un placer poder gozar de los distintos paisajes rurales de Oregon que Days Gone tiene para ofrecernos. Tal vez un aspecto que hubiese venido bien pulir un poco más antes de su lanzamiento, son las animaciones y el diseño de los personajes secundarios que no son importantes para la historia. Para dar un ejemplo, los rehenes que rescatamos en nuestros viajes se notan por demás robóticos a la hora de las conversaciones, como si no tuviesen expresiones, lo que contrasta con el buen nivel de detalle que tiene Deacon o Boozer.
Lamentablemente, algo que sí necesita mucha atención y que esperamos que pueda ser arreglado a través de una futura actualización es el tema de los errores. Durante mis horas en el título, me encontré con varios visuales, ya sean enemigos que spawnean de la nada o texturas que no se cargan correctamente en ningún momento o incluso una ocasión en la cual las montañas parecían colisionar y se unierse con la tierra. Creo que deberían solucionar este problema cuanto antes, dado que si bien no es algo que rompe al juego en cuestiones técnicas, sí le rompe la ilusión al jugador del detallado mapa que han logrado los desarrolladores de Days Gone.
El rendimiento del juego en PS4 Pro cuando no estamos en situaciones tensas o andando en nuestra moto, se siente fluido a 30 cuadros por segundo de manera constante. Los problemas ocurren cuando empezamos a andar en moto a altas velocidades o si estamos luchando contra demasiados enemigos al mismo tiempo, ya que aquí es donde se notan los problemas de framepacing que tiene Days Gone. ¿A qué nos referimos cuándo hablamos de este error? El título corre a los cuadros por segundo ya mencionados pero no de manera ordenada, teniendo si, 30 cuadros por segundo, pero cada segundo con algunos que tardan más que otros en cargar sin pasarse de la marca final. Esto genera una sensación de que el juego se siente “cortado” por momentos y da a entender que sus cuadros no son constantes. Si lo son, pero la diferencia de carga entre cuadros varía segundo a segundo.
La banda sonora es correcta, acompañando cada momento de la historia e induciéndonos terror cuando se trata de luchar contra hordas de freakers. Ademas, los actores de voz me gustaron mucho con especial énfasis en el de Deacon. Realmente uno puede sentir el sufrimiento y enojo que tiene en su interior cuando alguna situación lo pone nervioso. El aspecto sonoro que nadie puede ignorar es el motor de la motocicleta, el cual se escucha de manera excelente y en verdad logra un grado de inmersión mayor gracias a esto.
Conclusión
Para concluir, si bien Days Gone puede que no sea recordado como un exponente del genero Open World debido a que la formula ya ha sido explotada a lo largo de los últimos años, no se puede negar de que es un juego con un increíble grado de detalle. Su jugabilidad en cuanto a la acción y los disparos es super solida y tiene mucho contenido para disfrutar. Este es un juego que cualquier fanático de los apocalipsis zombies o de PlayStation no debería perderse.