El título de arcades japoneses llega a Playstation 4 con algunas piedras en el camino
Mucho después de los eventos de los anteriores juegos de Dissidia, la dimensión del Mundo B vuelve a crearse por el conflicto entre Materia, la diosa de la protección y Spiritus, el dios de la destrucción. Ambos, han convocado a los guerreros del caos y el cosmos como sus campeones, que retienen sus memorias de las guerras pasadas y de sus mundos originales, dándo y expandiendo la mística del Mundo B.
Ante la sospecha de la falta de conociemiento de los dioses con su mundo y entre ellos, los guerreros de Materia se separan para investigar un poco más acerca de este nuevo conflicto. Durante su viaje, aprenden de las invocaciones del mundo que ambos dioses fueron creados del deseo de Cosmos para proteger el mundo. También, vuelven a encontrarse con manifestaciones de Shinryu, el ente dragón que ocasionó las guerras pasadas entre Cosmos y Chaos. Estas. amenazan con absorber la energía del mundo y erradicarlo. Cuando las opciones se agotan, ambos bandos deciden unir sus fuerzas para derrotar a Shinryu y evitar el caos.
Dejando esta guerra detrás, los héroes y villanos regresan a sus mundos dejando réplicas de sí mismos con sus memorias de todo lo ocurrido en el Mundo B para que continúen peleando en nombre de los dioses.
Las peleas en este juego, se desarrollan en areas bastante grandes, en donde 2 equipos de 3 personas se enfrentan entre sí con un objetivo claro: obtener 3 muertes de cualquiera de los mimebros del equipo contrario. Para llegar a esto, la obviedad indica que tendremos que utilizar ataques icónicos de cada personaje de la franquicia para conseguirlo, pero es acá donde Dissidia pega una vuelta de tuerca. Cada pesonaje contará con 2 tipos de ataques distintos, que se realizarán efectivamente con 2 botones distintos. Uno de ellos es el bravery attack, en donde no restaremos vida pero si sumaremos puntos a nuestra “pileta” de daño, o bravery points. Así, con un numero más alto y quitando del enemigo dichos puntos para sumarnoslos a nosotros, efectuaremos el segundo tipo de ataque más fuerte: HP Attacks. Como el nombre lo indica, estos ataques reducirán la vida de nuestro enemigo, siempre y cuando lo pegues y no suframos por su extremado build up y la poca precisión de algunos. Más puntos bravery en nuestro haber se traducirán en más vida reducida a través de los HP Attacks.
Ahora bien, lo que te acabamos de contar es solo la mecánica principal del juego, pero no nos olvidemos que esto es un juego de peleas dinámico, 3D y con mucho para hacer. Vamos a poder efectuar combos, como en cualquier título similar, combinando direccionales junto a nuestros botones de bravery y hp. Cada personaje tiene su propio apartado, distinto de los demás, y concentra su estrategia en, por ejemplo, más opciones para puntuar y pocas para dañar (Cloud), o bien 2 tipos de combate distintos que forzarán a cambiar constantemente de “modo” (Cecil). Es realmente interesante remarcar que con la vasta cantidad de personajes disponibes, las posibilidades son muchas y fácilmente adaptables a como nos guste jugar.
Sea un Final Fantasy numerado, un spin off o un título de pelea, la excelente banda sonora nunca está ausente. Con pocos temas originales, Dissidia NT brilla por las piezas de cada Final Fantasy en cada una de las zonas de combate ambientadas por supuesto en las entregas incluídas.
La música acompaña, y las recreaciones de las piezas clásicas al mejor estilo de combate Dissidia nos dejarán boquiabiertos en más de una ocasión, incluso cuando estemos esperando por una partida online o simplemente desbloqueando skins y armas para nuestros personajes.
Conclusión
Dissidia Final Fantasy NT es un juego complicado, que no es para cualquiera. Con un gameplay bastante lento y tosco, incluso los fanáticos de los títulos de pelea se encontrarán con barreras que quizá el amor por los personajes y este interesante mundo crossover no pueda romper. Sin embargo, siendo paciente y entendiendo cada mecánica, NT puede disfrutarse, aún no siendo fanático de la saga. Si venimos por su apartado para un jugador, nos vamos a quedar con gusto a poco, especialmente en la vaga historia que este tiene para contar. Ahora bien, si tenemos suerte y no caemos en servidores llenos de latencia, quizá su variado modo multijugador logre atraparnos.