Muchos consideran la primera mitad de la década de los 90’ como la edad de oro de las aventuras gráficas, lo difícil es ponerlo en duda.
Con excelentes títulos como “Maniac Mansion”, “Day of the Tentacle” o “King’s Quest VI”, el mundo de los videojuegos era un lugar más sencillo, con un mercado menos masivo y clientes cuyo gusto distaba considerablemente del que conocemos hoy en día. Aquella industria naciente, abundante en ingenios creativos como el de Tim Schafer o Jane Jensen, fue la que vio nacer al “Grim Fandango”.
Realizar una reseña de un título tan comentado e interpretado por jugadores, periodistas y especialistas de todo el mundo no es una tarea fácil. Algunos elementos puntuales siempre volverán a la palestra, y es imposible no mencionarlos por ser los rasgos fundamentales que han hecho del “Grim Fandango” un juego imperecedero. Alusión aparte a la siempre asombrosa ambientación: universo mixto que desdibuja sus límites entre un muy logrado inframundo azteca y las notables influencias del género noir, propias de la cultura hollywoodense de los años veinte. Agréguese: una banda sonora adaptada correctamente a los momentos álgidos del juego y una colección apabullante de diálogos ingeniosos que, dudo mucho, tengan comparación. Así es, las aventuras de Manny Calavera cuentan con el mérito de poseer uno de los mejores guiones en la historia de los videojuegos.
Pero todas estas distinciones nos son harto conocidas, y la remasterización ha sabido implementarlas a los nuevos tiempos con soberbia maestría. En ese sentido, conviene analizar qué hay de diferente en ésta nueva versión que ha querido regalarnos la productora Double Fine.
Hablemos del apartado gráfico. En su momento, alabamos los cambios evidentes del “Monkey Island” de LucasArts y el “Halo: Combat Evolved” de Bungie, títulos que ya pasaron por el taller de curadores, ¿pero qué pasa con el Grim Fandango? La primera impresión que podemos llegar a tener es que el proceso de renderizado ha sido aplicado únicamente a los modelos 3D de los personajes, ignorando por completo los fondos y las panorámicas. Pues bien, no nos equivocamos. Lo cierto es que Double Fine no ha cambiado los fondos, pero sí ha ajustado la definición y realizado un excelente trabajo con el comportamiento de luces y sombras sobre el escenario, creando una sensación completamente nueva de verosimilitud que hace del juego una experiencia aún más inmersiva.
La interfaz de usuario es otro elemento a destacar. El título propone al jugador dos opciones de interacción: un movimiento relativo a la cámara, controlable a través del puntero del ratón y, por otro lado, un célebre aunque desgastado “modo tanque” —cuestión que algunos recordarán de los Survival Horror de principios del 2000—. Sobre el “modo puntero” no tenemos sino alabanzas. La integración de un pequeño menú de decisiones, bastante intuitivo por cierto, nos permitirá llevar a cabo cualquier acción necesaria. Asimismo, la aparición de flechas indicativas, dispuestas correctamente al momento de pasear el mouse sobre las áreas a las cuales podemos ir, también ha resultado ser un acierto por parte de los desarrolladores. Sin embargo, del “modo tanque” no podemos decir lo mismo, pues cuenta con algunos impedimentos que no extrañaremos de la versión anterior. Entre las dificultades pudimos apreciar la tristemente reputada inversión de controles al momento de cambiar de eje. Cuando surge esta dificultad es necesario dar curso contrario al personaje para no regresar, sin querer, a la zona de donde venimos.
Entre los detalles de color, la nueva versión nos brinda la posibilidad de disfrutar de contenido extra, del cual sólo hemos podido rescatar la amplia galería de bocetos desbloqueables y los comentarios de Tim Schafer, al más puro estilo de una edición especial en Bluray de la Guerra de las Galaxias. En este mismo apartado podremos controlar la resolución, que ha mantenido su ratio de 4:3, ahora con bordes decorados —lo que puede resultar engorroso para aquellos acostumbrados a jugar en widescreen—. Les recordamos que la opción de cambiarlo a formato 16:9 está disponible, pero no la recomendamos.
Agradecemos profundamente la conservación del doblaje al español, así como la posibilidad de cambiar el idioma en cualquier momento de la partida. Todas éstas referencias son una garantía de que es posible revivir ésta joya del entretenimiento tal y como lo hicimos la primera vez, ¿y por qué no? Quizá hasta podamos aventurarnos en la piel de un agente de viajes alemán o francés que, al parecer, ha pasado una larga temporada en México ¡Híjole!
Sin que resulte sorprendente, jugar al “Grim Fandango” casi dos décadas después nos ha traído los mismos sobresaltos y las mismas alegrías de siempre. Por lo que cabría preguntarse: ¿por qué remasterizar esta obra en particular? Más aún: ¿qué méritos individuales posee la nueva versión más allá de lo heredado de la anterior?
Tomando en cuenta que los cambios son bastante sutiles —casi todos relacionados con la jugabilidad— no podemos dejar de lado lo siguiente:
Una remasterización no es lo mismo que una restauración artística. Quizá, Tim Schafer ha querido preservar la esencia del juego, y desde esa perspectiva es algo absolutamente encomiable. ¡Saludamos al creador y a los hombres y mujeres que hicieron posible que una pieza como ésta llegue hasta nuestros días, extendiendo su vigencia a las nuevas generaciones! Sin embargo, no podemos olvidar que éste deleite no es gratuito, que cuesta dinero y que lo vamos a pagar. Ahí radica el meollo del asunto.
¿Y ustedes qué opinan?
RESUMEN
Hemos referido aquí a una serie de elementos positivos que, en su mayoría, pertenecen a la versión clásica, y no resultaría justo para nadie, en especial para los jugadores, valorar una reedición por méritos que le son absolutamente ajenos. “Grim Fandango Remastered” no trae consigo grandes cambios y el proceso de renderización ha justificado sus limitaciones en un supuesto respeto al espíritu original . Por ende, no consideramos que ésta nueva adaptación valga los 15 dólares exigidos, más tratándose de un estreno masivo.
El título se encuentra disponible en PlayStation 4, PlayStation Vita, Microsoft Windows y Mac OS X.
