Un héroe que nadie conoce y un juego que cae de lleno en la mediocridad y no genera confianza en el futuro de la saga de juegos de One Punch Man
Muy pocas veces en Outworld Gamers nos ha costado analizar un título de una franquicia de anime, principalmente por ser hábidos consumidores y a veces disfrutar de ciertos títulos por encima de la media. Esto no es un problema, claro está, por que esto es un análisis y es nuestra opinión. Sin dudas, hemos visto One Punch Man, nos ha gustado y somos fieles seguidores de los juegos que Bandai Namco Entertainment lanza, marcando siempre de la mejor manera posible sus errores y sus aciertos. Esta vez, caímos frente a una premisa indefendible y un juego que falla desde el vamos en fuertes cuestiones de diseño; qué ademas, se siente completamente apurado y sin el amor que un juego de One Punch Man (¡y siendo el primero!) merece.
One-Punch Man: A Hero Nobody Knows es un juego de peleas basado en el manga y anime creado por ONE e ilustrado por Yusuke Murata. Justo como el título lo dice, el protagonista puede vencer a cualquiera con un solo golpe, pero si vieron el anime esto ya lo sabían: es la premisa básica. Entonces, surge la siguiente pregunta: ¿como un protagonista que vence a sus enemigos de 1 golpe puede tener un juego de peleas? La solución fue mas omenos desarrollada desarollada para que su “super poder” tenga sentido, ya que el protagonista es un héroe que vos mismo creas y por supuesto, no es Saitama, el One Punch Man. Este héroe tuvo la oportunidad SI de ser salvado por el mismísimo Saitama tiempo atrás, lo que lo motivó para entrar a la Organización de Héroes y comenzar su camino de héroe. ¡Menos mal! Por qué jugar un juego donde fusilamos todo de un solo golpe sería… ¿Aburrido?
One Punch Man: A Hero Nobody Knows es un juego mitad RPG, mitad lucha 3D muy parecido a las adaptaciones que vemos hoy en día, todas inspiradas en mayor o menor medida en el éxito de Cyber Connect2 con los Naruto Ultimate Ninja Storm. Lamentablemente, la saga del invocador de clones y sapos que quiere ser Hokage fue la última gran entrega de la compañía en cuestión del género “Arena Fighters”. Más allá de tener juegos pasables de My Hero Academia, este juego no esta ni cerca de igualarlo en valores de producción y calidad. Es realmente difícil de entender en muchos aspectos como este juego pasó sistemas de calidad y testeo ya que, y sin listarlos todos, posee incluso errores por todos lados.
Estamos hablando de One Punch Man, entonces podríamos entender que la historia se presta para bien. Algo así, pero por mas de que la historia tenga una buena premisa, esta se vuelve extremadamente repetitiva y monótona ya que realizaremos misiones de la organización que en su mayoría consisten en pelear con enemigos random sin ningún tipo de emoción. De vez en cuando, te vas a encontrar con un héroe conocido y lo ayudas a derrotar a un enemigo más poderoso pero luego de eso, todo vuelve a lo mismo… duh.
Por otro lado un punto fundamental del juego que no lo beneficia nada, es el sistema de combate. Es extremadamente simple, repetitivo y aburrido. Todas las peleas terminan en apretar una infinidad de veces dos botones, y cada tanto usar algún poder especial. Si esto les resulta poco, y uno de los errores que mencionamos anteriormente, los combates están llenos de errores, generando que los enemigos queden rebotando en el suelo luego de que los derribes o que no se les pueda pegar durante varios segundos. El juego parece centrarse más en la destrucción del escenario, ya visto en My Hero One’s Justice 1 y 2, que en el combate en si, lo cual no es un punto positivo si buscas este juego por su sistema de combate. Rápidamente empezamos a causar destrozos en el terreno, incluso aparecerán eventos especiales que añaden ventajas para recoger en el escenario o traen algún cataclismo que dañe a los luchadores, o un “desafió” aparte del combate, como la lluvia de meteoritos o truenos repentinos.
Un punto positivo que posee el juego es la gran personalización que posee el personaje en todo momento, por mas de que sean meros efectos visuales es entretenido estar vistiendo de formas extrañas a nuestro personaje, no vamos a negarlo. También la variedad de ataques que pueden ser aprendidos es amplia, sin embargo se sienten bastante similares entre ellos. Otro punto a destacar, es la ambientación que posee el juego ya que es muy acorde a los visto en el anime, con elementos bizarros por doquier y héroes que tienen atuendos extravagantes. A pesar de que la ambientación sea la correcta, no quiere decir que trasladado a un juego esto se sienta bien. La ciudad es sumamente innecesaria, con misiones secundarias por doquier aburridas, que de secundarias no tienen nada por que tendremos que realizarlas para poder avanzar nuestro rango de héroe y así avanzar con la historia. El avance de la historia, además de estar trabado por misiones que pueden ser llevar un objeto de un punto A a un punto B, posee combates que no pueden ser ganados, y es el caso de la mayoría de ellos. Estamos frente a un juego de pelea, que no posee un menú como para aunque sea, disfrutar de nuestros personas en un 1 vs 1 tranquilos. Vamos a tener que jugar el tutorial, el largo tutorial, y en la historia no vamos a poder ganar combates, siempre vamos a ser salvados. Se estarán preguntando, ¿enserio? Bueno, es un poco el chiste o mecánica principal diseñada para One Punch Man. Desde su anuncio, vimos que el juego contaba con una especie de televisión por directo en los combates que avisaban la llegada de un héroe, muchas veces Saitama (el que más tarda, por supuesto). La llegada de este héroe es la única forma que tenemos para completar algunos combates, y si es el protagonista del anime, lo vas a hacer en un turno. La primera vez, como chiste, está bien. La segunda, quizá. ¿Toda la campaña que dura aproximadamente 6 a 7 horas? No, por favor no.
Conclusión
One Punch Man: A Hero Nobody Knows es el típico juego pensado para fans del anime. Tiene muy difícil atraer a los jugadores novatos porque tampoco profundiza mucho en los héroes, y desde luego el sistema de lucha es muy simple , pero One Punch Man posee un poco de humor y para la sopresa de muchos el aspecto más difícil la presencia de Saitama se soluciono bien. En resumen, un juego de lucha simple que va a entretener a los fans del anime que no busquen un juego profundo ni desafiante a la hora de luchar, sino que estén más interesados en ver las aventuras de sus personajes que en un juego competitivo.