Square Enix nos sorprende con un remake muy fiel al juego original… quizá demasiado
Trials of Mana, también conocido como Seiken Densetsu 3, es un JRPG para Super Nintendo que nunca vio la luz fuera de Japón. Esto sin duda fue un punto fuerte de partida para el remake ya que para mucha gente este juego no era una “rejugada” del antiguo sino que una experiencia nueva. Sin duda alguna Trials of Mana posee algunos aspectos que en la actualidad quedan un poco mediocres.
Para los jugadores más experimentados de los JRPG este juego les puede parecer “sencillo y lineal”, ya que el juego no nos presentara ninguna dificultad para avanzar a lo largo de los 6 capítulos que incluye la trama principal, los niveles de los enemigos escalan de forma regular y la historia por más interesante o no que pueda parecer es extremadamente lineal ya que deberos movernos de un punto a otro sin ninguna complicación.
Desde el principio Trials of Mana se diferencia del resto de los JRPG ya que nos presenta a un grupo de heroes que los podremos seleccionar desde el principio. Este grupo consta de 3 héroes y podremos elegirlo entre 6 diferentes integrantes que cumplen las funciones básicas, cada uno de los seis personajes es diferente y poseen estadísticas y habilidades que los acercan hacia un estilo de juego: tanque, mago, apoyo, DPS.
Esta elección de personajes a su vez nos formara una historia principal que surgirá del protagonista (el primero que elijamos) y se ira entrelazando con los otros 2 personajes que elijamos.
Sin embargo no todo es color de rosas, por más de que cada uno de los personajes tenga su historia, en el juego solo existen 3 grandes historias que su cambio más radical es el villano final al cual nos enfrentaremos. Con el resto de los aspectos no son más que problemas individuales de cada personaje que se irán resolviendo a medida que avancemos en la historia.
Con respecto al sistema de combate este es mucho más fluido que el original ya que cada vez que entramos en batalla tendremos un pequeño escenario para movernos con libertad y lanzar nuestros ataque físicos, hechizos, o “habilidades únicas” de cada personaje. Se Puede cambiar entre cualquiera de los personajes dentro de la batalla, pero directamente solo manejarnos a uno mientras que los otros dos se las arreglarán solos con algunos comportamientos preestablecidos simples que los podremos organizar de cierto modo en el menú.
Uno de los añadidos más interesantes de Trials of Mana respecto al original: es que al subir de nivel y gastar puntos en las diferentes categorías o al hablar con determinados NPCs, obtenemos ‘habilidades’; estas son pasivas que se clasifican según una de las cinco estadísticas y pueden alterar por completo el estilo de un personaje. Ya que algunas nos darán 30% extra de porcentaje de critico y otra 30% más de daño mágico por ejemplo por lo que el estilo de nuestro personaje se vuelve único.
El cambio de clase es uno de los aspectos más recordados por los fans de Seiken Densetsu 3, y en Trials of Mana se implemento de la misma forma. Cada personaje empieza con una clase predeterminada, y al llegar a cierto nivel y en lugares específicos podemos cambiar de clase eligiendo entre dos opciones “Light y “Dark” cada una de estas llevaran a nuestro personaje hacia distintos estilos de juego. Unos cuantos niveles después y mediante un objeto especial, podemos volver a cambiar de clase, de nuevo eligiendo entre dos posibilidades. Por lo que en total sin contar la clase inicial, cada personaje tiene 6 clases posibles a la hora de jugar, lo que nos deja con un total de 36 clases si contamos a los 6 posibles héroes.
Por si no fuera suficiente, Trials of Mana añade otras dos clases, completamente nuevas de este Remake, que actúan como clase definitiva para cada personaje. Esta se puede obtener en el nuevo capitulo postgame desarrollado para este juego y por más de algunas incongruencias con la historia principal, este se torna muy atractivo y llevadero.
Aunque el juego pueda parecernos corto ya que dura poco más de 20 horas, si queremos experimentar todas las historias y derrotar a todos los jefes esto nos llevara más de 60 horas.
Otra Elemento a mencionar es la posibilidad de seleccionar el nivel normal/difícil de dificultad y, por lo general, Trials of Mana es un juego excesivamente fácil. Solo algunos jefes pueden llegar a darnos algún tipo de problema. Pero el juego es tan generoso con los objetos de curación que difícilmente van a derrotar a nuestro equipo completo.
Según lo investigado en diversas fuentes uno de los aspectos a destacar en el juego original era la inclusión del ciclo día/noche que permitía que los hechizos y enemigos cambiasen. Sin embargo en el juego actual no se vio modificado por lo que el anuncio del cambio entre el día y la noche puede para nuestro gameplay, algo que puedo ser resuelto con una notificación al costado de la pantalla.
Otro aspecto que también se nota que quedo antiguo es el sistema de armaduras/armas ya que cada vez que llegamos a un nuevo pueblo o ciudad podremos comprar un arma que es significativamente mejor por lo que las armas son olvidables así como con un escaso tiempo de vida.
Conclusión
La realidad es que Trials of Mana es un gran JRPG que nos mantendrá entretenido por las 20 horas que incluye la aventura. No tanto por la historia, que en muchos aspectos se vuelve repetitiva y poco interesante sino por su paleta de colores que sumado al 3d y el sistema de combate simple pero bien logrado nos irán llevando por los capítulos.